- 
Ahora es cuando más se les necesita pero lo tienen apartado de forma miserable. Antes algunos se auto invitaban al palco de honor o había cola para comprar un palco VIP. Ahora la Nueva Condomina está vacía, salvo por los pocos miles de murcianistas que son los verdaderos HÉROES de este Real Murcia de la soledad.
Olvídense de Samper, de los precios de los abonos (los de tribuna preferente, que los fondos mal no están), olvídense de las cosas que se hayan hecho mal en las oficinas y en el terreno de juego. Es injustificable el ninguneo al que está sometido esta casi centenaria entidad que representa, lo quieran algunos o no, a la Región de Murcia y que está presente en el corazón de decenas de miles de murcianos. Muchos piensan que el primero en abandonar al club es el propio dueño, sin embargo es el que mantiene, mal y apurado pero lo mantiene, al Real Murcia. Así las cosas, se le pone en bandeja a Samper el argumento de “tengo poca ayuda”.
Duele ver al Imperial y al Juvenil alejados de la capital, haciendo su gira por los municipios de la Región, cuando a otros se les dan los campos de entrenamiento que quieran en la ciudad o muy cerca. Aunque la gestión de Samper sirva como excusa para ningunear al Real Murcia, “no cooperamos porque el dueño no lo está haciendo bien y queremos que se vaya”, a muchos murcianistas estos detalles no se les van a olvidar nunca, es decir, el maltrato que recibe el primer equipo de la Región, esté quién esté al frente.
Fruto del sudor de sus dirigentes, el Real Murcia construyó La Condomina en 1924. Pasó a ser del Ayuntamiento a mitad de los noventa por un precio de risa. En 2006, gracias al Real Murcia, se construyó un estadio fantástico que se cedió al municipio aunque el uso sea para el equipo pimentonero. Qué poca memoria. Qué rápido se olvidan esas cosas. Qué rápido quieren algunos enterrar este escudo. Qué rápido les vamos a señalar todos los que queremos a este club.
Comentarios
Lo de cerrar es un decir, porque se quedaron flecos en el aire, que a la larga van en detrimento del club.
Desde entonces, las partes se han increpado unas a otras, y las ayudas han cesado.
El futbol tradicional ha muerto en Murcia. Cada vez son más los que se atiborran a futbol televisado, sea del club que sea, preferiblemente gratis y en streaming.
Se suman a participar de la gloria de otros equipos que no son de su ciudad, y carecen de sentimiento hacia el escudo del club de su tierra.
Si gana, bien, y si pierde, se ríen.
El Real Murcia, como tal, tiene las horas contadas con Samper, y en el plazo máximo de cinco años, si se aprueba la modificación del convenio, se liquidará.
Espero que de un giro porque pinta mal.
Lo que no estoy del todo de acuerdo es que la situación no cambiaría sin Samper. Sin Samper hay muchas más opciones de que la gente empiece a moverse y apoyar aunque minimamente. Y poco a poco hacer efecto llamada y hacer la bola más grande arrastrando a más colaboradores. Porque un proyecto nuevo e ilusionante siempre será mejor que la NADA que ofrece el señorito de Madrid.
Con Samper es IMPOSIBLE. El grado de rechazo es comparable a los apestados y enfermos contagiosos de la edad media, la gente sale huyendo con solo oir su nombre.
Por tener, tiene hasta una imputación muy grave en proceso. Además de muchas sombras con sus negocios, empresas y cuentas. Mucha gente saca su abono y no va al estadio pero muchísima más no se saca el abono porque no se fía de lo que hace este señor con ese dinero.
Y luego oyes a Victor Alonso y es para llorar. Cero autocrítica. Y eso encabrita aún más a la gente.
Si el nuevo convenio se firma, las únicas soluciones que se vislumbrarían para el club pasarían por:
- una resolución dura contra Samper en el caso Umbra que lo largaría de la propiedad.
- que Hacienda instara a liquidación (podría favorecer el cambio de propiedad).
- que la juez le quitara el mando del club (difícil, pero con voluntad habría argumentos para ello).