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El 26 de julio es un día clave en la guerra entre Mauricio García de la Vega y Raúl Moro. Ese día, en Madrid, tendrán una audiencia ante el árbitro español del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que semanas después tendrá que decidir sobre quién tiene razón en la disputa por las acciones del Real Murcia. El mexicano y el extremeño aportarán la documentación que estimen para que el árbitro dé la razón a una parte u otra. Hay quienes señalan que el TAS tardará en pronunciarse muchos meses mientras que el mexicano señala que la decisión desde Lausana sería entre agosto y septiembre.
Si gana Mauricio García de la Vega, las primeras cosas que hará el empresario americano serán pedir al Consejo Superior de Deportes que le inscriba como dueño del paquete accionarial que le corresponde del Real Murcia, exigir la dimisión inmediata del consejo de administración liderado por Víctor Gálvez y tomar el control del club pimentonero. Su estrategia legal es esa y frenar la ampliación de capital prevista por Gálvez ya que la impugnará como hizo recientemente con la junta de abril. Hasta que no tenga la confirmación del TAS de que es el legítimo dueño del club, no impugnará en la justicia española la junta de junio y la futura de agosto. Si Raúl Moro pierde ante García de la Vega tendrá que devolverle a Gálvez el dinero que le pagó por el club y todo el dinero invertido por el nuevo presidente y con intereses. Si gana Moro pedirán al CSD que inscriba a Gálvez como propietario del club y se preparará para los recursos y maniobras legales del mexicano por la vía mercantil española. Recientemente la jueza archivó la denuncia por estafa que interpuso Moro contra García de la Vega.
Por su lado en el Real Murcia entienden que Mauricio no pone pegas al nuevo consejo de administración al centrarse solo en la ampliación de capital fijada en abril. No obstante esa interpretación no la comparte el mexicano, que dice que forma parte de su estrategia legal no centrarse ahora en eso y esperarse a que el TAS le dé la razón.
Mauricio carga contra la gestión de los Gálvez
El mexicano señala que no se puede pagar con tarjeta de crédito los abonos y que eso le hace desconfiar de la forma de recaudación. Además mantiene que se está volviendo a fichar con pólvora de rey, sin presupuesto y condenando otra vez al club a asumir gastos muy altos que luego darán problemas como ocurrió esta campaña.
