- 
El Real Murcia de José Manuel Aira se presentó en La Línea de la Concepción sin muchas variaciones a lo que nos tienen acostumbrados. El técnico pimentonero optó por el clásico 1-4-4-2 en el que Chavero actuó con más libertad en el interior izquierdo y por el sector derecho de medio campo fue protagonista Javi López. El malagueño es uno de los más cuestionados de la plantilla, pero contra 'La Balona' completó un encuentro bastante completo, supliendo la falta de acierto con mucho trabajo.
En la primera mitad se observó cómo el césped fue un factor que no favoreció en absoluto a los granas. Los botes extraños y los resbalones fueron algo habitual durante los 90 minutos y se posicionó como factor determinante que perjudicó al espectáculo futbolístico y favoreció al pelotazo y juego directo. Todo ello hizo que fueran los locales, crecidos anímicamente después de ganar los últimos partidos en casa, quienes llevaran casi todo el peligro sobre la meta de Fernando.
Los pimentoneros tuvieron que esperar a la segunda mitad, para empezar a dominar y llevar peligro. El técnico leonés, una vez más, gracias al acierto en las sustituciones y al buen planteamiento del choque consiguió llegar a los últimos minutos con todas las opciones de asaltar un campo difícil como es el de La Línea de la Concepción. Y es que, Aira lo tenía claro, cómo bien dejó a relucir en rueda de prensa tras el choque contra el Linense, su equipo se siente cómodo cuando un partido se alarga: "Nosotros si no somos capaces de poner el resultado a nuestro favor en los primeros minutos buscamos partidos largos. En esos encuentros estamos sacando buenos resultados".
Los resultados hablan por sí solos, el Real Murcia es el equipo que más puntos ha conseguido gracias a goles conseguidos en los últimos 15 minutos de partido y en un encuentro que se presuponía muy duro por el buen momento de su rival y con el condicionante añadido del césped artificial, Aira no dudó en buscar alargar el choque, macerarlo, y buscar el buen estado anímico de los suyos para aprovechar los últimos minutos de partido para llevarse los tres puntos.
La idea estaba, al entrenador solo le faltaba distribuir las piezas en la partida y como viene siendo habitual esta temporada, acertó. En el descanso tuvo que realizar la primera sustitución obligada debido a la desafortunada lesión de Ruso que le tendrá apartado de los terrenos de juego unas cuatro semanas. En esta sustitución, Aira dio entrada a Guilló en el medio centro y retrasó la posición de Armando que cumplió con creces en el centro de la zaga.
Tras el cambio obligado, el de Ponferrada sustituyó a un Rafa cansado de fajarse en el cuerpo a cuerpo en un partido tan físico y puso sobre el césped a Sergio García, a la postre autor del primer gol murcianista. Este cambio hizo que Chavero ganara en transcendencia en el choque ocupando la posición de pivote y fuese el recién ingresado Sergio García quien ocupara el interior izquierda.
Pero sobre todo, donde estuvo el partido fue en la tercera y definitiva sustitución, en la que Fran Moreno sustituyó a un fajador Azkorra. El delantero pamplonés se eligió clave al ser el autor de la asistencia del primer gol a Sergio García casi en el primer balón que tocaba y autor del segundo gol en una falta directa que sorprendió a Lolo Soler en los instantes finales.
Una vez más un 4-4-2 planteado acertadamente fue determinante, pero no solo el sistema está siendo clave en la buena temporada grana, también el acierto de los jugadores menos habituales cuando les toca asumir responsabilidades. En esta ocasión fue Fran Moreno el que se llevó el 'oscar´ por su papel protagonista, también Fernando por sus paradones, pero los actores principales del éxito grana son muchos en lo que llevamos de año y el equipo se está viendo beneficiado de ello.
