Tras caer ante La Hoya, vencer al FC Jumilla e imponerse en La Condomina al UCAM, el Real Murcia tiene este domingo ante sí un nuevo derbi, el último de la primera vuelta. Llega a Nueva Condomina un FC Cartagena que ha sabido reponerse del inicio de temporada, como le sucediera a los granas, aunque su bache ha sido más profundo.
El equipo de Víctor Fernández llega séptimo (25), a cinco puntos de la cuarta plaza que ahora mismo ocupa el Sevilla Atlético. Llega tras tres victorias consecutivas, por lo que es uno de los conjuntos más enrachados del grupo IV junto al propio Real Murcia. Todo ha cambiado en poco tiempo en la ciudad portuaria: salvación tras los encuentros de promoción por la permanencia, cambio de propietario... pero ahora la cara del equipo albinegro es otra.
La noticia principal está en la grada. Se espera la llegada de cientos de cartageneros a la capital del Segura que, sumados a los habituales aficionados pimentoneros y quienes vayan a este partido por el morbo que suscita, puede hacer que las gradas presenten la mejor entrada de la temporada. A su favor, que no coincide con el partido del UCAM Murcia CB de baloncesto (juega en Gipúzkoa a las 18:00 horas).
José Manuel Aira no podrá contar con los lesionados Sergi Guilló, Fran Moreno, Isaac Palazón y Simón Ballester. El partido ha sido declarado de alto riesgo por las autoridades, pero esperamos que lo que prime sea la deportividad y la rivalidad sana.
Con el espíritu del Ruso García, y los murcianistas saben a qué se refiere uno, el Real Murcia quiere seguir "en cabeza" de la clasificación y proseguir, de este modo, con su inmaculada racha sin conocer la derrota desde el 25 de octubre.